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| Juan Gil, Entre racimos y cañas, un paisaje se derrumba, 2010 óleo sobre tela, 103 x 79 cm |
Juan Gil
Gil, quien envía por primera vez a
Todos por el Arte, nos presenta una obra inserta en la tradición del desnudo
alegórico. Tomando en cuenta los atributos de la figura, cañas de azúcar y
cambures, cabe la posibilidad de que la retratada represente a Venezuela o a
América —piénsese en el papel que los cultivos de dichos productos desempeñaron
en el desarrollo de estas entidades; por otro lado, el carácter mestizo de la
mujer la liga a los procesos de hibridación cultural de nuestro continente—. En
último caso, tiene cualidades suficientes para encarnar una realidad colectiva.
Con buen empleo de la paleta y del dibujo, sobre todo del escorzo, Gil parece
insertar un elemento ora irónico ora satírico cuando hace apoyarse a la figura
en un colchón envejecido a punto de caerse. Es allí donde la subtitulación del
cuadro nos resulta pertinente: “un paisaje se derrumba”. ¿Cuál paisaje?”, cabe
preguntar. Nos aventuramos a señalar que es plausible que los “sueños” o
ideales propios de los procesos independentistas de nuestro país o continente
(libertad, desarrollo, igualdad, etc.) parecen ser blanco de un gesto de
desilusión burlesca por parte del artista. Así mismo, es probable que sea
necesario preguntarse si la elaboración de un cuadro de este talante hoy día
representa, por homología, una alusión a la situación social actual de nuestros
pueblos.
Escrito por: Alejandro Useche
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